Turn

Turn es un arcade en el que tendremos que intentar llegar tan lejos como podamos a través de un laberinto infinito lleno de esquinas. Para doblar una esquina tan sólo tendremos que tocar la pantalla en el momento justo. El problema es que si tocamos la pantalla demasiado pronto o demasiado tarde, perderemos un trozo de nuestro cubo protagonista. Y cuanto más pequeño se haga nuestro cubo, más fino se hará el camino; por lo que cada vez resultará más y más difícil.

Lo normal es que cada vez que doblemos una esquina, nuestro cubo y el camino se hagan más pequeños. Sin embargo, si conseguimos doblar a la perfección cuatro esquinas de forma consecutiva, agrandaremos un poco nuestro cubo (y en consecuencia el camino). Eso sí, necesitar tener muchos reflejos para hacerlo.

Turn es un arcade desarrollado por Ketchapp que ofrece exactamente lo que cabría esperar en un título de Ketchapp: una mecánica sencilla y adictiva, y un apartado visual sencillo y bonito.